Nara es una de las ciudades preferidas para realizar excursiones de un día desde Kioto y Osaka. Esto se debe a la gran cantidad de lugares que ver en Nara, entre los que se incluyen templos preciosos y parques llenos de ciervos que son, sin duda, los protagonistas de la ciudad.
Hoy dedicamos esta entrada a todo lo que tenéis que saber para visitar Nara en 1 día, desde qué ver en Nara, dónde comer o si merece la pena. La información proporcionada en los párrafos siguientes se basa en nuestra propia experiencia (pasamos un día en Nara en abril de 2024) además de la preparación de nuestro viaje, momento en el que recopilamos más sitios que ver en Nara de los que pudimos visitar.
Qué ver en Nara en 1 día
Ubicación de Nara
Una vez visto el mapa que hemos creado para visitar Nara, pasemos a ver dónde se encuentra Nara en el mapa de Japón para que os hagáis una idea y podáis incluir esta preciosa ciudad en vuestro itinerario.
Nara se ubica a unos 30 kilómetros al este de Osaka y a unos 35 kilómetros al sur del centro de Kioto. Como veremos en la sección dedicada a cómo llegar a Nara, existe conexión ferroviaria entre Osaka y Nara y entre Kioto y Nara, por lo que la distancia puede cubrirse en poco tiempo y de forma cómoda.
Qué ver en Nara
Antes de pasar a ver lo que recomendamos ver en Nara, os dejamos aquí debajo un mapa que hemos creado y que muestra la ubicación concreta de todos los lugares que recomendamos ver en Nara, además de el restaurante donde comimos en Nara y que nos gustaría recomendar.
Ahora sí, pasemos a ver los lugares de interés uno a uno.
Parque de Nara
Nara es famoso por sus parques llenos de ciervos. Aunque también podremos verlos paseando por las calles de Nara, la mayoría de ciervos podremos encontrarlos en los varios parques que tiene Nara cerca de la zona de templos (veremos parte de los mismos a continuación).
Nota: Importante mencionar que los ciervos son salvajes, por lo que hay que tener cierto cuidado al tratar con ellos, especialmente si viajamos con niños pequeños.
Pasear por los parques y zonas arboladas de Nara es, de largo, una de las actividades que más disfrutamos durante las horas que pasamos en la ciudad. Son varias las zonas verdes por las que podremos pasear y disfrutar de la compañía de los ciervos salvajes que pueblan la zona.
Para los que quieran dar de comer a los ciervos de Nara, hay muchísimos puestos en los que venden unas galletas que les encantan por 200 yenes cada paquete (de unas 10 galletas cada uno). Pudimos comprobar que los ciervos están muy activos en busca de galletas pronto por la mañana pero tras varias oleadas de turistas, dejarán de estarlo y pasarán a echarse tranquilamente al sol.
En el momento en el que están más activos, hay que tener algo de cuidado, especialmente si se nos acercan varios, puedes pueden tratar de pegarnos pequeños mordiscos en el pantalón y no les damos las galletas lo suficientemente rápido, lo que puede llegar a ser peligroso si viajamos con niños pequeños. Por el contrario, no les molestéis si véis que están echados al sol y no hacen ningún movimiento al ver que os acercáis con galletas.
Templo Todai-Ji
El Templo Todai-Ji es uno de los más famosos de Nara. Construido por primera vez hacia mediados del Siglo VIII (aunque barrido por el fuego en varias ocasiones y reconstruido más tarde), este templo contiene una estatua enorme de Buda fabricada en bronce y que podremos disfrutar a muy poca distancia dentro de uno de los pabellones del templo.
Una vez visto el Buda gigante dentro del pabellón Daibutsu-den, podremos seguir el paseo mientras disfrutamos del resto de edificios, siendo especialmente interesante (al menos en nuestra opinión) el Nigatsu-Do, ubicado a cierta altura y con vistas impresionantes. El edificio que sigue en pie es una reconstrucción de mediados del Siglo XVII, pero el primer edificio ubicado en esta zona parece datar de los siglos VIII-IX.
El precio de la entrada es de 800 yenes por persona salvo para los niños y niñas entre 6 y 12 años, para los que cuesta la mitad. La entrada nos da acceso a todos los edificios del complejo.
El Templo Todai-Ji es, sin duda, uno de los imprescindibles que ver en Nara.
Templo Nigatsu-Do
Ya lo hemos comentado en la sección del Todai-Ji, pero este templo merece una sección propia. Y es que el Nigatsu-Do, al que se accede comprando la entrada para el Todai-Ji y siguiendo el camino una vez visto el Gran Buda, nos pareció uno de los edificios más bonitos de Nara.
Ubicado en una colina en la parte más alta hacia el este del Todai-Ji, el Nigatsu-Do ofrece unas vistas impresionantes de Nara y sus alrededores, además de los edificios de la zona aledaña al templo y los plados de alrededor. Además, a su lado hay una sala donde poder descansar y tomar algo de te de forma completamente gratuita, lo que viene genial para recargar pilas.
Sin duda otro de los imperdibles que ver en Nara, no os lo perdáis.
Santuario de Tamukeyama Hachiman-Gu
Este santuario se encuentra entre el Nigatsu-Do y el santuario Kasuga-Taisha que describimos más abajo.
Al igual que los anteriores, el santuario de Tamukeyama Hachiman-Gu fue establecido hacia mediados del siglo VIII. No es especialmente espectacular, menos aun si lo comparamos con el Gran Buda del Todai-Ji o las maravillosas vistas del Nigatsu-Do, pero merece la pena una visita rápida si pasáis por la zona.
Wakakusayama Hill
La colina Wakakusayama se encuentra entre los templos y santiarios que hemos visto en las secciones anteriores y el Santuario Kasuga-Taisha que pasaremos a ver a continuación. Si pasáis por el camino más corto entre esos lugares, os encontraréis con la colina a vuestra izquierda.
Esta colina se alza sobre toda esta zona de la ciudad y nos permitirá una de las mejores vistas de Nara. Podremos disfrutar tanto de las vistas de la ciudad como de los ciervos que pasean y descansan por la zona.
El precio es de 150 yenes por persona para adultos y estudiantes de secundaria (o mayores). El precio se reduce a 80 yenes para niños y niñas a partir de 3 años y hasta educación primaria.
Santuario Kasuga-Taisha
Este santuario sintoísta fue construido en el año 768 y luce un colorido impresionante.
El santuario principal contiene una serie de edificios interconectados con preciosos colores anaranjados que contrastan con las lámparas de bronce que cuelgan de muchos de los tejados (incluyendo las que se encuentran en una sala de lámparas que se disfruta a oscuras). El precio es de 500 yenes por persona salvo para estudiantes de secundaria o más jóvenes, que no tendrán que pagar.
El santuario no es especialmente grande, por lo que podréis verlo en unos 20-30 minutos para pasar después a disfrutar de los alrededores del santuario, que son, si cabe, más bonitos. Los alrededores están completamente arbolados y paseando por los caminos podremos encontrar desde ciervos a toriis escondidos. Una maravilla poder pasear por esta zona tras un largo día de visita.
Cómo llegar a Nara
Lo más normal es visitar Nara mientras nos alojamos en Osaka o Kioto, por lo que veremos cuáles son las formas más sencillas y baratas de realizar el trayecto desde estas dos ciudades.
Cómo llegar a Nara desde Kioto
La mejor manera de llegar a Nara desde Kioto es tomar una de las líneas ferroviarias que realizan este trayecto. Hemos identificado tres:
- Nara Line: La Nara Line es una de las líneas de JR y realiza el trayecto entre Kioto y Nara en una hora más o menos, parando en una quincena de paradas entre la estación de origen y la de destino (que es la estación JR de Nara). El precio del billete es de 720 yenes por persona (unos 4,50 euros al cambio) desde la estación de Kioto, siendo la forma más barata de las que veremos. Importante mencionar que esta línea está incluida en el JR Pass, por lo que los que posean el JR Pass no tendrán que abonar el billete.
- Kintetsu Limited Express: El Kintetsu Limited Express es la forma más rápida de realizar el trayecto, y es que en unos 36 minutos (con solo 3 paradas) realizaremos el trayecto desde la estación de Kioto hasta la estación Kintetsu-Nara, ubicada más cerca de los lugares turísticos que la estación de JR. El precio es de 1.280 yenes por persona (unos 8 euros) aunque el billete nos permite reservar un asiento, por lo que nos aseguramos viajar de forma muy cómoda a cualquier hora del día.
¡Este es el tren que tomamos y no nos arrepentimos en absoluto! Recordad que no es suficiente con pasar la tarjeta de transporte que tengáis, tendréis que comprar un billete extra. Este billete no está incluido en el JR Pass. - Kintetsu-Nara Express: Parecido al anterior pero sin ser «limited», nos llevará desde la estación de Kioto hasta la estación Kintetsu-Nara en unos 47 minutos. El precio es de 760 yenes por persona.
Para conocer qué línea os conviene más en base a la hora en la que vayáis a realizar el trayecto, os recomendamos utilizar Google Maps.
Cómo llegar a Nara desde Osaka
El tren es la opción más barata para realizar el trayecto entre Osaka y Nara. Estas son dos de las formas:
- Yamatoji Line: Tomando uno de los trenes de la línea Yamatoji podremos llegar a Nara en unos 50 minutos y por un precio de 820 yenes por persona. Este billete está incluido en el JR Pass.
- Kintetsu-Nara Line: Otra opción es la línea Kintetsu-Nara Line que realiza el trayecto entre la estación Namba de Osaka y Nara en menos de 40 minutos y por 680 yenes por persona. No incluido en el JR Pass.
¿Merece la pena visitar Nara?
La respuesta es, sin ninguna duda, sí. Nara nos pareció una visita obligada si contáis con un día extra en la zona de Kioto u Osaka, las dos ciudades turísticas más cercanas. Lo fácil que es llegar a Nara desde Osaka o Kioto (como hemos visto) es uno de los pros de este organizar esta excursión de día.
Pero no es el único. Y es que la ciudad en sí es preciosa, con varias zonas en las que disfrutar de un paseo reconfortante entre ciervos. Además, son varios los lugares de interés repartidos por la ciudad con varios de ellos ubicados en la zona oriental de la misma, por lo que podréis visitar varios de ellos en pocas horas y sin necesidad de tomar el transporte público o un taxi.